Vístete según tu tono de piel ¿cálida o fría?

Por: Alex

Cuántas veces te han dicho: Qué bien te ves, qué te hiciste, y piensas -pues qué raro porque no me hice nada  especial-; te ves en el espejo y dices -la verdad hoy sí estoy guapa-.

También hay otros días en que te preguntan -¿estás cansada?, ¿te desvelaste?, o ¿estás malita?-, traducción “te ves fea». Y tú, con tal de cambiar esto, te peinas, acomodas la blusa, te maquillas diez veces en el día, y hasta el perico te cuelgas, aunque el maleficio no desaparece.

Como te ves te sientes y viceversa. ¿El secreto?… el color.

Por muy sencillo que parezca, el color de la ropa que usas puede ser la diferencia, ya que por muy costosa o fashion que sea puede hacerte ver o súper guapa o del nabo.

Entonces, el color es el elemento más importante, ya sea en ropa, la decoración de tu cuarto o la envoltura de tu galán (o sea la ropa que trae el bombón que te gusta).

Conocer un método científico para saber cuáles son los colores que te van, te ayudará a proyectarte con mayor confianza y sentirte mejor.

La naturaleza es tu mejor guía, no se equivoca.

¿Has notado la combinación perfecta de las flores y de los animales?, también el mundo cambia su colorido cuatro veces al año en cada estación: en otoño hay tonos ocres, verdes y dorados, mientras que en primavera los colores son más vivos. Por otro lado, los genes hacen que nuestro color de piel, ojos y cabello combinen súper bien.

¿Eres cálida o fría?

Los colores se dividen en cálidos y fríos. Los primeros tienen como base el amarillo, los segundos tienen como base el azul.

Algunos colores cálidos son verde perico, café canela, blanco marfil, rojo coral y naranja. Entre los colores fríos están el verde bandera, rojo cereza, café chocolate, blanco nieve y rosa.

A tu piel siempre le queda alguna de las dos familias, para ver con cuál observa el tono de tu piel bajo la luz natural, pon la parte interna de tu muñeca sobre una superficie blanca para encontrar el tono. Encontrarás tonos beige, rosa, azulado, etc. Si tienes dudas compárala con el tono de piel de otros, y si sigues sin ver la diferencia, entonces olvídate de este rollo y mejor ¡ve al oftalmólogo! porque lo que necesitas son unos lentes, jajaja.

Ahora ponte frente al espejo, toma prendas o tela en los colores arriba mencionados y ponlos debajo de tu cara, compara cómo se ve tu piel con los diferentes tonos y pídele a alguien que te ayude con el diagnóstico. Si tienes el pelo pintado tápatelo con un pañuelo, ahora que si te ves mejor con el trapo en la cabeza, entonces sí, ni cómo ayudarte. 😀

Mini Test
¿Te bronceas rápido en tonos dorados y el color te dura varias semanas? Tu piel es cálida.
¿Tu piel es sensible y tarda varios días para llegar a tomar un ligero color? Tu piel es cálida.
¿Te bronceas paulatinamente en tonos café y el color te dura poco? Tu piel es fría.
¿Tu piel es muy sensible al sol, se pone roja de volada y no llegas a broncearte bien nunca? Tu piel es fría.
*¿Tu piel tiene un color verde tipo salón de clases? Vete a la playa y hazte un favorcito, no te creas, es fría.
Ya ubicado tu tono de piel, copia los colores que ves en la naturaleza durante las épocas de frío o calor.

¿Qué color le queda a tu piel?

Si tu piel es fría, te quedan los colores brillantes e intensos como fucsia, verde bandera, azul añil, negro, blanco, o muy claritos, como azulados, grisáceos, rosas, perla, magenta, uva, etc.
Si tu piel es cálida te quedan los tonos oro, naranja, verde ocre, musgo, rojo canela, amarillo, menta, crema, verde limón, café o marfil, entre otros.

Haz la prueba

Un día utiliza cerca de la cara algún color cálido y otro día un color frío, de inmediato vas a sentir la diferencia.
Si tienes dudas ven a I Love Me, donde analizaremos tus colores de manera profesional, para que te sientas más guapa que nunca.

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